19 días matándome, 500 noches en vela, hasta Sabina olvida más rápido que yo, pobre infeliz.
Eso de la auto-compasión, en fin...
También me mato por dentro y nadie dice nada. De vez en cuando toca.
Mudo, como la h, tocado y hundido chica. Jodido, sin más.
Cuando hasta el desahogo que entra por mis oídos es triste dime ¿A dónde miro? Cuando fue verano escuchaba llover, no sé si era fuera o solo mi conciencia llorando por pensar demasiado otra vez.
Creo que voy a preguntar a Galeano, padecemos lo mismo al parecer.
Ya lo dijo él:
"No consigo dormir. Tengo una mujer atravesada entre los párpados. Si pudiera, le diría que se vaya; pero tengo una mujer atravesada en la garganta"
Yo tengo una mujer atravesada en el alma, estamos en las mismas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario